¿Se ha preguntado alguna vez hasta qué punto afecta la iluminación a la experiencia de compra de un cliente? Pues bien, los estudios han demostrado que tiene un impacto bastante grande, más de lo que podría imaginarse. Porque sería impensable tener una tienda llena de productos sin luz para mostrarlos, la iluminación es uno de los elementos más importantes a tener en cuenta a la hora de diseñar la distribución de una tienda.
No hay dos tiendas iguales y cada una tiene necesidades de iluminación diferentes, pero hay principios y directrices básicas que deben tenerse en cuenta a la hora de crear un esquema de iluminación que atraiga a los clientes y les haga volver a por más. A continuación se ofrecen algunos consejos para sacar el máximo partido a su espacio comercial mediante la luz.
Corrección del color
¿Alguna vez ha entrado en una tienda y ha sentido la necesidad de acercar una camisa, bufanda o lo que sea a un escaparate para poder ver mejor su verdadero color? Esto se debe a que la luz natural tiene un índice de reproducción cromática perfecto, o lo que nos gusta llamar 100 CRI. Ya explicamos el IRC en un artículo anterior, pero en resumen: cuanto más alto sea el IRC, más vibrantes y verdaderos serán los colores para el ojo humano. A la hora de elegir la iluminación de un espacio comercial, es una buena idea instalar una iluminación con un CRI muy alto, de 85 o más. Las bombillas incandescentes y halógenas tienen un CRI perfecto de 100, mientras que las luces LED y fluorescentes están disponibles con un CRI superior a 80.
Contraste y puntos focales
Según el mismo estudio mencionado, la creación de contrastes mediante zonas claras y oscuras debería ser un área de atención mayor que la propia luminosidad de la tienda. Al crear contrastes con la iluminación, se crea profundidad y los clientes pueden percibir mejor los productos. Centrarse en el contraste también le da la oportunidad de crear diferentes niveles de atención entre los distintos productos. El uso de luces de carril o de focos es una forma eficaz de crear contrastes y designar puntos focales. Como los escaparates suelen ser la primera impresión que tiene el cliente de la tienda, los contrastes y los puntos focales son especialmente importantes en esta zona. Según la Asociación de Tiendas de Museos, una buena regla general es hacer que estas zonas puntuales iluminadas sean tres veces más brillantes que la luz ambiental circundante.
Crear ambiente
Saber qué tipo de ambiente quiere crear en su tienda es crucial y la iluminación puede ayudarle a conseguirlo. Según un estudio en dos partes realizado por Zumtobel, junto con el Real Instituto de Tecnología y la Universidad de Ciencias Aplicadas de Hamburgo, la temperatura de color de la luz es capaz de influir en la forma en que los clientes se sienten en un espacio. Se descubrió que las temperaturas de color blanco frío (3500K a 5000K) crean una sensación de amplitud, mientras que las temperaturas de color blanco cálido (2700K a 3000K) transmiten una sensación de familiaridad y pequeñez. La temperatura de color de la luz que elija dependerá del tipo de ambiente que quiera crear.
Estanterías bien iluminadas
Si va a exponer artículos dentro de estanterías y armarios, el interior de sus expositores debe estar bien iluminado. Hablando por experiencia personal, hay pocas cosas más frustrantes que rebuscar entre un montón de camisas dobladas en una estantería para encontrar la talla adecuada y darse cuenta de que apenas se ve la etiqueta. El uso de cintas luminosas LED ocultas dentro de los perfiles es una buena manera de iluminar discretamente las estanterías más pequeñas. El estudio de Zumtobel descubrió que una combinación de retroiluminación de área amplia e iluminación de acento hace que los artículos presentados parezcan más atractivos y que la identificación de la mercancía sea mucho más fácil.
Rayos UV y calor
Otra cosa que hay que tener en cuenta a la hora de elegir el tipo de iluminación que se va a utilizar y dónde se va a utilizar es el efecto que podría tener sobre sus productos. El uso de lámparas que emiten mucho calor podría dañar y decolorar las telas y otros materiales si se exponen a los rayos ultravioleta (UV) y al calor durante un período de tiempo prolongado. La iluminación LED no emite rayos UV ni una cantidad notable de calor, lo que la convierte en una opción inteligente en áreas donde las luces brillan sobre los productos constantemente.
¿Hay alguna pregunta sobre la iluminación de los comercios que le gustaría que contestáramos? No dudes en dejarnos un comentario a continuación, o danos un toque en Facebook, Twitter, Google Plus, LinkedIn o Pinterest.